jueves, 27 de febrero de 2020

NICASSO Y EL NARCISISMO.




Era previsible de una mente esquizoide como la de nicasso llegar a estos estadíos de ego y 
autoestima en los que al muy cabrón le gustaba hasta su pintura. 
Cansado ya de teorizar sobre la esencia , los fundamentos o las técnicas y los procesos se 
dedicó a descubrir la estética... el puro placer del gozo por la percepción visual. 
A veces por las tardes después de comer se quedaba mirando al papel emborronado como si quisiese
entrar en el dibujo, y comprobaba que falta una rayita, un elemento o un color que desatase el 
equilibrio , mojaba la punta del pincel y lo arrastraba con cuidado hasta sentirse satisfecho. 
Me gusta. Se decía asín como pa sus adentros interiores.... ha quedao niquelao... está dabuti....ni lo toques....y cosas asín pa confirmarse en su apresiasión, vale? 
Las últimas ansias productivas le habían llevado a rellenar más de cien garabatos en un mes en 
los que poco a poco se vislumbraba un estilo. 
En esta etapa en que las palabras se ocultaban sin valor en otras de sus pluripolares personalidades afloraba la validez de lo impersonal. 
Ya era antigua esa teoría del desaprender.....